10 marzo 2011

lagrimas

Hola, buenos días, tardes o noches, dependiendo en que estado del día se encuentren, llevo tiempo pensando en esta entrada del blog, desde el lunes que tuve un extraño sueño y eso no debió haber pasado solo pasa cuando hay luna llena, recuerdo poco del sueño pero una parte la recuerdo con toda claridad, ya saben que mis sueños parecen reales.

Bueno lo que voy a escribir después de esto no tiene nada que ver con el sueño, más bien es una loca idea que se me vino a la mente de escribir un cuento, digo cuento porque se que va a estar pequeño tampoco voy a escribir muchas páginas, solo lo necesario para poder ir practicando, espero hacerlo bien, por el momento ya tengo como inicia y termina la historia, los personajes ya los tengo definidos, así que solo me falta desarrollarla, algo no tan difícil o eso creo, bueno de tomas maneras como no tengo mucha experiencia en esto creo que me voy a tardar un ratito pero seguro que si lo acabo. Espérenlo pronto...

Deja que me quede así un momento, sin verte porque tengo tantas ganas de derramar mis lagrimas pero no quiero que pienses que soy débil, simplemente sentí hacerlo, puede que haya sido de tristeza, de dolor, de alegría o de placer, en ese momento no lo sentía, solo quería hacerlo, solo deseaba liberar la presión que mi corazón sentía después de escuchar todo lo que parecían mentiras.

El día me acompaño en mi desfile de lagrimas, porque comenzó a llover, como queriendo ocultar lo que ya estaba ocultando, tal vez de esa forma me verías más normal. Cúbrete dijiste, pero me quede pensando en que podía hacer, como explicar lo que en este momento estaba pasando. Entre mi decía, si era el momento para decírtelo o simplemente callar, como siempre lo había hecho, porque escuchar tus mentiras no daban valor para poder confesarte, tantos sentimientos que esperaban pacientes salir de mi corazón.

Momentos después me percate de que la lluvia se había mezclado con toda esa avalancha de sentimientos, recobre mi conciencia y solo pude decir estoy bien, no te preocupes. Te mire fijamente a los ojos y solo pude decir estoy bien, pero cuanto más tendré que esperar para poder gritar todo esto.

Podemos irnos, dijiste. Claro conteste, mientras por mi mente se formulaba la siguiente pregunta ¿Por qué sigues mintiendo?, una y otra vez esa pregunta caminaba por los senderos de mi mente y de pronto escuche que solo te despediste y yo asentí, nos vemos después.

Después de que te marchaste, me quede contemplando las nubes que se alzaban en lo alto del cielo, todas queriendo decir también estamos tristes. Pero yo no estaba triste conteste, solo que no puedo seguir así, no puedo aférrame sin tener una esperanza, esto no puede ser normal.

Bueno, algo corto pero suficiente, no creen. Y ya por último una frase que me acaba de llegar.

“MEZCLAR LA FANTASÍA CON LA REALIDAD ES TAN FÁCIL QUE NUNCA PODRÁS DIFERENCIARLAS”

0 comentarios:

Publicar un comentario